Verano
Verano. Desde el Departamento de Derecho de la Cultura de Gabeiras y Asociados nos sumamos a esa imprescindible actividad que es aprovechar los recesos de la actividad diaria para reflexionar sobre los acontecimientos y los encuentros del pasado más inmediato para preparar el futuro. Hacer memoria y guardar una suerte de registro de lo que hemos hecho hasta ahora es fundamental para saber quiénes somos, dónde estamos y hacia dónde vamos, es decir, para aprender de los errores, perseverar en los aciertos y mejorar en lo posible en lo porvenir.
Este curso que ahora culmina ha sido para el Departamento un año emocionante en el que hemos crecido como equipo y hemos emprendido nuevos proyectos. Pero sobre todo hemos ido creciendo cada cual individualmente y en la interacción cotidiana, laboral, académica y divulgativa, gracias a todo lo aprendido y vivido en los diversos foros de encuentro y trabajo común, como el Aula de Gabeiras y Asociados.
En efecto, una de las iniciativas en las que más ilusión se ha depositado este año, y de la que se ha ido dando cumplida cuenta en nuestro blog es el Aula. En ella, hemos tenido la oportunidad de abrir nuestras puertas a académicos, juristas, políticos, agentes culturales y otros participantes de muy diversos perfiles para, desde la especificidad y la diferencia de sus diversos ámbitos, avanzar en la construcción de un discurso común jurídico-cultural. Así, se ha arrancado la actividad del Aula con las Jornadas de espectáculos públicos, en las que se han analizado tres temas de actualidad jurídico-administrativa (la problemática de las licencias, la puesta a disposición de espacios públicos en régimen de alquiler, y el ruido) de la mano de tres especialistas, con el propósito de servir a modo de “think tank” para las reformas de las leyes de espectáculos públicos que están en proceso. Para Gabeiras y Asociados el hecho de ser capaces de generar y acoger un diálogo de índole interdisciplinaria que pueda revertir en la calidad de nuestro ordenamiento jurídico dota de un nuevo y profundo sentido a toda la actividad del despacho.
En el nuevo curso, a partir de septiembre, el Aula dará comienzo con un seminario sobre la nueva ley de procedimiento contencioso-administrativo a cargo de la jurista Concepción Jiménez Shaw. Asimismo tendremos una sesión de recapitulación de las jornadas de espectáculos públicos y de las propuestas para los procesos de reforma de las leyes autonómicas en este ámbito concreto. Desarrollaremos, en tercer lugar, unas jornadas acerca de la financiación de la cultura en tres Seminarios, con ponentes de gran prestigio en sus respectivas áreas de conocimiento, como Carlos Fernández-Peinado, Susana de la Sierra y Patricia Gabeiras.
A esto se añade otra vía de comunicación en la que hemos intentado aproximar la actualidad desde la perspectiva del Derecho de la Cultura aprovechando el hilo de Ariadna de la difusión de contenidos de calidad por internet a través de las ya imprescindibles redes sociales. Esta vía es el Blog de Derecho de la Cultura, que nace con la vocación de contribuir modesta pero decididamente a esta área de conocimiento transversal por excelencia en el campo del Derecho y en la que Gabeiras y Asociados tiene un papel pionero. Para acercarse nuestra disciplina, que poco a poco se va haciendo con un espacio propio e inconfundible –como en su día tuviera que hacer el Derecho medioambiental–, no hay nada mejor que mostrar ejemplos prácticos de los métodos y lógica propia, basada en una interdisciplinariedad y en una visión jurídica de la cultura, y cultural del derecho, en las diversas entradas que se han ido publicando a lo largo del curso. En el blog hemos tenido el honor de tener como firmas invitadas a Ania González y Beatriz Barreiro Carril, y esperamos que la nómina de colaboradores se vaya ampliando, con el consiguiente enriquecimiento de los puntos de vista y aproximaciones al hecho jurídico-cultural.
Con este texto ponemos un punto y aparte a nuestro blog, que reanudará sus publicaciones en septiembre, tras la pausa estival. Aprovecharemos este tiempo que fluye con un ritmo tan propicio para la reflexión, para hacer balance y explorar nuevas lecturas del derecho que aporten un comienzo renovado para el curso que viene. Buen verano, y gracias por acompañarnos en este camino.