Cada vez tienen más presencia, tanto a nivel internacional como nacional, las medidas y decisiones que pretenden asentar la idea de la integralidad e importancia de la cultura. La creciente presencia de la cultura en las Constituciones de las últimas décadas no es secundaria. Igualmente, la transversalidad de la cultura que afirman la Unión Europea y la Carta Cultural Iberoamericana dotan de gran proyección institucional a la cultura. Por otro lado, hay pronunciamientos, aun desde formulaciones muy genéricas, que también apuntan en esa línea, como la calificación de la cultura como “bien público mundial” que hizo la Conferencia Mundial de UNESCO (Mundiacult, septiembre de 2022).
Esas medidas, que resultan muy significativas, deberían estar sin embargo harmonizadas desde una perspectiva conceptual y permitir su desarrollo, para el disfrute de los derechos por parte de los ciudadanos y para obligar al cumplimiento por parte de las administraciones públicas.
Por ello, a comienzos del 2023 pusimos en marcha desde la Fundación este grupo de trabajo multidisciplinar para abordar el tema desde las diferentes áreas científicas concernidas: derecho, economía, sociología y gestión cultural. El objetivo es dotar de una reflexión sólida al debate actual sobre la “cultura como bien básico”, que permita su correcto desarrollo y concreción. A través del cual se trabaja para facilitar la transformación legislativa y normativa que permita que la cultura sea entendida como un bien esencial a proteger y la participación cultural un derecho a facilitar en toda su extensión.
La producción teórica sobre esta materia es una de las piezas fundamentales del grupo, pues nos permite contar con textos rigurosos a través de los cuales empezar a asentar las bases de propuestas marco centradas en el desarrollo de un sistema público de cultura.
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